«‘EL OLOR DEL SILENCIO’ de María Aixa Sanz me ha parecido una novela maravillosa. Hay dos aspectos o puntos en ella que destacan y que a mí personalmente me han fascinado:
1. La lealtad y el amor del nieto por su abuelo
2. La reflexión a la que invita la novela

El segundo punto es la sucesiva reflexión a la que invita la novela, sin caer en lo denso, sí que es de esas novelas en que uno debe apartar la vista del texto, levantar la cabeza y reflexionar sobres sí mismo o sobre su entorno o vida. Puesto que todos los personajes y todas las situaciones que se producen en ‘El olor del silencio’ van más allá de lo que en un principio parecen. Es decir, su autora, María Aixa Sanz, no se ha quedado en la superficie sino que ella y sus personajes escudriñan hasta el fondo, sabiendo que las verdades están en los pequeños detalles, conociendo que para saber en verdad qué significan las cosas uno debe bucear hasta el fondo de los asuntos y todos los personajes de ‘El olor del silencio’, lo hacen, bucean y se sumergen hasta el fondo de sus vidas para saber, para comprender. Eso es bello. El no querer quedarse en la superficie de las cosas es bello. Es interesante. Demuestra inteligencia. Denota pasión. Todos, absolutamente todos, los personajes de esta novela son a la par inteligentes y apasionados. Todos sienten una absoluta pasión por la vida y por la comprensión de ésta.
Hacía tiempo que una novela no me impactaba tanto como lo ha hecho ‘EL OLOR DEL SILENCIO’, había oído hablar de este título y de su autora, y descubrirla en primera persona a ambas: a la novela y a la novelista ha sido de las mejores cosas que me han pasado en el último año y eso que ando liado siempre entre libros y escritores.
‘EL OLOR DEL SILENCIO’ debería ser una lectura obligatoria. Pero como no me gustan las imposiciones. Les digo que es un maravilloso encuentro. Ustedes deciden. »
© Alfredo Avilés.
Bibliotecario - Reseña elaborada para EL PLACER DE LA LECTURA